El Último
Capítulo 3: "No mires"
Capítulo 3: "No mires"
- Papi, ¿porqué llora mami?– su hija había llegado hace poco del colegio sin avisar. Hoy la habían soltado temprano, por lo que no tuvo tiempo para disimular nada.
- Mami está bien– le mintió a su hija, mientras la sostenía entre sus brazos. A sus espaldas escuchaba a Kathy sollozar, ahogándose entre lágrimas y almohadas – Mami está muy bien... déjala descansar un poco. ¿Cómo te fue hoy?.
El sol los había premiado con un día maravilloso, por lo que luego de comer algo salieron hacia el departamento a donde se mudarían en un tiempo más.
- ¿Se ve la casa de mami desde aquí?– le preguntaba su hija cuando ella se asomaba por el balcón. El departamento aún estaba sin ningún mueble y el olor a nuevo aun permanecía casi intacto.
- Ten cuidado Isi ¿ya? No tienes que asomarte mucho cuando no estemos mirándote.
- Si sé papi, ya me lo han dicho.
- Hace caso entonces, ¿o no te acuerdas de que tu mamá te dijo que no miraras hacia abajo?– le decía esto a su hija cuando le indicaba el suelo. A Kathy nunca le gustaron las alturas, ni tampoco compartió la decisión de mudarse a la ciudad, siempre dijo que podía ser malo para Isidora.
- Quiero que se quieran de nuevo– mientras hacia un puchero a su padre.
El sol los había premiado con un día maravilloso, por lo que luego de comer algo salieron hacia el departamento a donde se mudarían en un tiempo más.
- ¿Se ve la casa de mami desde aquí?– le preguntaba su hija cuando ella se asomaba por el balcón. El departamento aún estaba sin ningún mueble y el olor a nuevo aun permanecía casi intacto.
- Ten cuidado Isi ¿ya? No tienes que asomarte mucho cuando no estemos mirándote.
- Si sé papi, ya me lo han dicho.
- Hace caso entonces, ¿o no te acuerdas de que tu mamá te dijo que no miraras hacia abajo?– le decía esto a su hija cuando le indicaba el suelo. A Kathy nunca le gustaron las alturas, ni tampoco compartió la decisión de mudarse a la ciudad, siempre dijo que podía ser malo para Isidora.
- Quiero que se quieran de nuevo– mientras hacia un puchero a su padre.
- Pero si nos queremos Isi... es complicado la verdad, pero te prometo que cuando seas mas grande te lo explicaré todo, ¿ya?."Evacúen la zona, evacúen la zona", se escuchaba a mis espaldas desde la calle, trayéndome al presente. Vi la televisión prendida y al viejo observarla totalmente petrificado. Girando mi cabeza, observé hacia la calle el rojo espectáculo sin hacerle caso a lo que decía Kathy, "No mires hacia abajo". El titular en la noticia decía "¿Epidemia canina?", justo antes de que ingresara al departamento y se cortara la luz. El viejo pego un grito; casi respondiéndole, un gruñido que venía de la oscuridad del departamento se hizo notar. No estábamos solos y tampoco teníamos balas, pero nada superaba mi preocupación por ella y mi hija, teníamos que salir de aquí como sea.